La duquesa de Sussex admitió que adaptarse a la vida real
había sido difícil y que no estaba preparada para el nivel de escrutinio intenso
de los medios al que estaba sometida, a pesar de las advertencias de sus amigos
británicos de que los periódicos podrían destruir su vida. El príncipe Harry también
describió su salud mental y la forma en que maneja las presiones de su vida
como un manejo de riesgos constante. Después de perder a su madre, ver a su
esposa ser víctima de las mismas fuerzas poderosas era muy difícil para el
duque.
Es muy probable que esta decisión no fuera una decisión
tomada en familia. Se sabe que no se consultó a ningún otro miembro de la familia
real, ni a la reina Isabel II, ni al príncipe Guillermo antes de emitir la
inesperada declaración. Una portavoz del palacio dijo que la familia estaba decepcionada.
Dicen que la falta de consulta probablemente causará daño a la relación de
Harry y su familia.
Antes de Harry solo Eduardo VII dejó la corona para
casarse con Wallis Simpson, una estadounidense que ya había divorciado dos
veces.
La declaración en la cuenta de Instagram de los duques de
Sussex recibió más de un millón de “me gusta” y muchos comentarios apoyándoles.
Pero también recibieron comentarios que fueron mucho menos alentadores.
Ahora que dividen su tiempo ente Reino Unido y Norteamérica
lanzarán una nueva entidad caritativa. Además, seguirán con sus compromisos
reales. Desde la partida de la familia real Harry ya comporta más tranquilamente
que se puede ver, por ejemplo en el vídeo del Late Late Show. En este vídeo
Harry y James Corden viajan por Los Ángeles en un autobús de dos pisos y hablan
sobre los cambios en la vida de Harry y Meghan.
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